El jardin de las delicias.

Echando la vista atras y reducir en palabras lo que fue durante todo este tiempo lo vivido en Indian Creek solo me cabe añadir una frase,El jardin de las delicias.Creo que es la mas adecuada y la que mas se ciñe al entorno,no deja de ser un lugar propio de soñadores,mas bien yo me atreveria a decir que es un lugar para grandes soñadores que ven al otro lado de las barreras impuestas por el hombre y las fronteras de lo imposible ya que a veces alcanzar otros continentes parece cosa de conquistadores,aunque tambien es verdad que hay otras muchas fronteras al lado de nuestra casa en que no hay que cruzar un gran charco o tan solo un pequeño riachuelo pero que no dejan de ser tan encantadores como otros muchos.....

Una vez hartos hasta la saciedad solo nos queda pensar en volver por los mismos peldaños
que nos conducieron hasta aqui con las manos llenas de rasguños y con la cabeza bien alta.

El laberinto de las agujas.

Encalladas como fantasmas a lo largo de todo el cañon las agujas forman una encrucijada,dispersas por todos los rincones que forman sus entrañas son el enlace de un laberinto perdido.Una estrategia elaborada minuciosamente sin ningun orden que la convierte
en la reina de la profundidad,el escaparate del paisaje o el elemento que enriquece nuestros ojos.