Los dias se prolongaron del mismo modo,sumandose la noche con el amanecer y los atardeceres se extinguieron para todos en tintes rosados y calidos colores hasta quedar sumida la oscuridad.
Hasta este mismo punto en que pluma en mano y punta mojada en tinta retrato sobre papel el pasado,se sucedieron los echos del mismo modo,caras nuevas que en lecturas fui imaginando y la mera casualidad me presento y,otros vagos retratos de gente que me parecian conocidos pasaron de frente en un saludo medio vacio,quizas incompletos en mi memoria y los que todavia aguardan en este cercano mundo.Asi se fueron sucediendo las sumadas alegrias bajo una roca dorada por el sol y de largas tardes de magnesiadas conversaciones.
El tiempo en forma de rayo impacto para mi y la compañia de Blasco en Margalef,caimos en el puro cansancio de nuestro desenfreno y nuestras ganas de hacerlo todo,solo nos quedo la reflexion de que esto requeria de un par de dias o como mucho,dos semanas dedicadas al reposo quizas no tan exhaustos o quizas,no tan severo descanso pues entre ese periodo nuestras reglas sumaban dias de roca a otro nivel por supuesto,pero con una unica clausula que abajo los firmantes de mutuo acuerdo aprobaron de romper las reglas en cualquier momento.
Pedro y Blasco.
